Un reciente artículo de la periodista Diana López Varela analiza cómo vivir en el medio rural incrementa el riesgo de sufrir violencia machista y dificulta aún más su denuncia. A partir de datos del Instituto Andaluz de la Mujer y de un estudio de FADEMUR, se evidencia que muchas víctimas residen en municipios pequeños, donde la falta de servicios de atención, la presión social, la dependencia económica y el aislamiento complican pedir ayuda. El texto subraya la necesidad urgente de recursos, protección efectiva y políticas públicas que garanticen la igualdad y la seguridad de las mujeres en el rural.
Vivir en el rural aumenta el riesgo de sufrir violencia machista (y de que sea silenciada) | Público
